Las copas de Cata
COPA DE CATA PERFECTA
Existen varias características que hay que tener en cuenta para elegir una buena copa de cata, lo primero es fijarnos en el tamaño del tallo de la copa, hemos de tener presente que el tallo debe ser suficientemente largo como para poder coger la copa, y evitar así que nuestra mano caliente el vino. Su longitud debe permitirnos también un adecuado movimiento del vino (no sería así, de ser demasiado largo).
Otra característica a tener en cuenta es el ancho de la boca, este no debe ser demasiado ancho, ya que esto haría que se escapen los aromas, cuando lo que buscamos es que los aromas se concentren en la parte superior.
Por último, es importante el material con el que está hecha la copa, ya que el vidrio puede dar al vino unos reflejos distorsionando su color real. Para una visión del vino más clara, nuestra copa de cata perfecta ha de ser de cristal.
Si bien en el mercado existen gran variedad de copas estándar, que cumplen todas las características que hemos detallado anteriormente, existe una copa normalizada; la copa "Afnor", utilizada internacionalmente para la cata de la gran mayoría de vinos, fabricada en cristal y que responde a la Norma Internacional Iso 3591-1977. No obstante y ya que esta claro que cada vino ha de ser degustado en su copa más adecuada, muchos profesionales nos recomiendan la copa "Oenologue", que es más estética y con más capacidad.
En cuanto a la cata, actualmente la copa oenologue está ganando adeptos frente al catavinos. La oenologue es una copa de tipo balón de boca más ancha, visualmente más atractiva y que permite introducir boca y nariz simultáneamente. Está hecha con un cristal más fino que la AFNOR, pero es más pesada, lo cual unido a un tallo más largo facilita los movimientos rotacionales de la copa.
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